"Arrebato por el futuro", artículo que publiqué en La Nación el miércoles
El artículo empieza así:
Un amigo dice que la década del 70 no termina nunca en la Argentina. Muchos creen correcto que así sea: han pasado cosas muy graves, dicen, no podemos hacer como si no hubieran sucedido. Pregunto: ¿tienen privilegio los seres idos sobre los seres vivos? ¿Eran más nuestros muertos que nosotros, que nuestros hijos? ¿El sentido del presente es el de revisar el pasado o el de hacerle lugar a lo nuevo y necesario?
La historia es tiempo muerto, está llena de personas muertas. Sí, muchos de ellos han sido seres queridos, nuestros. A muchos incluso los extrañamos y los tenemos muy presentes. Pero los vivos somos nosotros. Para la tanguera pasión por el pasado a la que creemos una virtud siendo exactamente lo contrario, resultan más importantes los muertos que los vivos. Más importante reivindicar una causa pasada que atender los problemas presentes. Más importante definirse en relación a conflictos extintos que resolver positivamente los actuales. ¿Se busca la historia buscando identidad? Extraña manera de encontrarse, buscando entre fantasmas..
2 comentarios:
Habría que sumar al hecho de que no solo se aferra a la historia, sino también a la "mala" historia.
Yo creo que hay 2 grandes mentiras que provienen de esta mala historia:
1) La legitimidad del peronismo a través de la adhesión popular a un sistema de "justicia social".
2)El mito de la oligarquía como fuerza política de naturaleza opresiva.
El peronismo es una ilusión que debe su éxito no a lo que produjo,sino a lo que dejo de producirse. El fenómeno regresivo que represento ese "movimiento", es la manifestación de una Argentina que se agoto como país productivo, de generador de valor ante la economía mundial. Las masas despojadas aparecen allí donde hay mas gente que puestos de trabajos. El peronismo los genero en función a la posguerra, pero de esa bonanza no quedo nada, por lo cual la opción del general, resulto desventajosa al sistema productivo de la Argentina. ¡Ni hablar de esa corporación sindical que dejo como herencia!!!...
La "oligarquía", tiene mala prensa y un pésimo sistema de comunicación. Nunca supo gritar a los 4 vientos que de sus entrañas salieron los políticos que convirtieron a este despoblado territorio en una República. Darle las gracias a Inglaterra no queda bien, pero lamentablemente esta en las estadísticas.
En su condición de tenedores de la única riqueza explotable, les toco el rol de villanos, cuando el hambre de los demás comenzó a tocarles las puertas. De sus filas no volvieron a salir políticos de calibre como los supo tener en el pasado. La "oligarquía" también fracaso al contentarse solo con la tierra. No supo mirar el presente de su tiempo que abogaba por la industrialización. Su vinculación con los golpes militares fue su manotazo de ahogado.
El presente, lógicamente esta hecho del pasado, como los herederos de este estado de cosas, nacida mas por la carencia ante que de la "abundante riqueza de la Nación"; bien convendría mirar al presente y percibir que las ideologías nos quieren estafar de nuevo con sus absurdas mitificaciones irracionales.
Nuestro presente es un mundo que se construye solo con conocimiento. Ciencia y un sano apetito por el placer.
¿Pensamos seguir colaborando con la construcción de la Korruptocracia?..
¿ Vamos a rifar nuestra República civilizada ante la horda barbara que se benefician y construyen la carencia?
Lo dijo buda. El futuro es la suma de todos los presentes.¡Que fantástica verdad!...
A-veces te leo buscando complicidad, como cuando optaste por no ceder tu asiento a un anciano sabiendo que lo mejor para él (sus músculos, vitalidad, ejercicio) era mantenerse de pie. Te dieron todos con un palo pero muchas veces sentí eso mismo.
En este caso también estoy de acuerdo con lo que explicas, lo siento así y agradezco que lo expliques.
Tengo 35 años y los amigos con los que mejor me comunico suelen tener más de 70 años, de apoco se van yendo, los lloro, los extraño y los suelto.
Disfruto de escucharlos hablar del pasado, suelen recordar las cosas lindas, las picardías, aventuras y logros. A su vez saben escuchar y conservaron un respeto romántico. Varias veces llego a la conclusión de que lo que estoy intentando, lo que sueño y deseo, ya sucedió. El agua y el aire estaban limpios, la fruta y la verdura eran de verdad, la gente era generosa y solidaria. Había muchísimas cosas por madurar y desarrollar pero se nos fueron de las manos. Hablo aquí del sentido intimo, personal, privado y espiritual de los habitantes de este país y no del ámbito político-social, del cual considero que se traumatizó, enfermó y aún como organismo no logró dar con la química adecuada para combatir el virus psíquico que lo invadió desde su más antigua formación. Habremos tenido oportunidades y herramientas, recursos humanos y riquezas en abundancia por tierra fértil hasta los horizontes pero seguimos siendo pobres, pobres porque nuestras mentes se arremolinan y fagocitan en hechos del pasado, atroces, violentos, horribles, claro que si y también olvidables. Ponen tanto empeño y dinero en que lo recordemos que olvidar parece un pecado.
Admiro tu coraje, por eso cuando leí lo que escribiste transformó mi nostalgia en certeza vital. Me gusta tu espacio, sos una fuente fresca.
No sé si lees esto pero si así fuera te agradezco también por haberme tentado y provocado a escribir.
Abrazo
Publicar un comentario