Reflexiones a propósito de la película "El código Da Vinci" y de la polémica en torno a ella suscitada, elaboradas para Hora Clave de ayer:
Es una película que salva al Vaticano y al cristianismo de toda sospecha, a lo sumo esboza la idea de que hay un elemento femenino descuidado que podría ser reconsiderado. No se entiende la molestia de tanto religioso abochornado.
Es una película que sirve a la actualización del cristianismo. La iglesia tendría que estar agradecida por este libro y esta película que la acerca a la gente.
Lo que pasa es que la jerarquía eclesiástica no quiere acercarse a sus fieles, prefieren encerrarse en doctrinas fuera de época.
¿Qué importa Jesús en el fondo? ¿El cristianismo no trata de valores? ¿Desde cuando el mito es más importante que la vida?
El protagonista permanece casto, cuando podría haber consumado un encuentro pagano con la supuesta hija de cristo… Esa solución es recatada y poco frecuente.
¿Por qué tanto espamento por una película? Cuanto les cuesta la libertad…
Sí, es una variación de la historia real, construida con algunos datos reales y otros ficticios y algunos otros dudosos, ¿no se conoce esa variedad de ficción que juega con aspectos de la realidad pasada? Lo que pasa es que la cristiandad que se enoja no entiende que la disciplina de otro tiempo ya no existe más. Ahora la gente es cristiana si quiere y a su manera.
No es que los ateos no creamos en nada, es que la creencia no es la estructura de nuestro sistema de sentido. No necesitamos creer, estamos firmemente instalados en la vida de otra manera, de una manera que los creyentes no pueden entender. Más respeto. Existe la diferencia.
Creer en la nada es lo que suponen los creyentes que ocurre en la psicología de un ateo, pero eso es algo que les pasa a ellos, que sienten que sin Dios no hay sostén para la vida. Los ateos sentimos que la vida va mucho más allá que la idea precaria de un dios creador, que el misterio es más profundo, y la vida maravillosa de una manera que un creyente no puede entender.
¿Dónde está el amor que Jesús pregonó si no se tolera nada?
En la evolución no se cree. Es algo que se sabe cuando uno deja de creer.
Esos análisis que pretenden que desde hace poco ocurre lo que pasó siempre, y que encuentran en la falsa novedad la prueba de la pérdida de los valores, son un lugar común y generalmente expresan una mirada bastante ignorante. Variaciones de la Biblia hay desde siempre, evangelios apócrifos y películas sobre temas sagrados existen desde hace mucho tiempo.
Ilustro este comentario con unos bocetos de Leonardo.