Diálogo nacional
Alguien dice: después de la crisis no aprendimos nada, otra vez la típica economía de ciclos patológicos característica de la Argentina
Otro dice:
El alguien primero responde: hay un mandato simbólico de fracaso, al fracasar triunfamos, tenemos que cumplir con la fatalidad…
Otro: sí, la filosofía miserable del tango, que se permite alegrías siempre y cuando sean pasajeras y no tengan consecuencias, el tipo pierde a la mujer, nunca tuvo hijos…
Alguien: si, es un nene, el tanguero, por eso pone énfasis en la voz de varón, simula la virilidad que le falta
6 comentarios:
Me hiciste pensar;gracias al amor que le tengo al tango, y que no acuerdo ni un poco del lado de los "males" argentinos. Al contrario, creo que está del lado de nuestros "bienes", en el amplio sentido de la palabra. De hecho es una de nuestras riquezas turísticas.
Más allá del tango creo que, como sociedad, sí aprendimos algo, por ejemplo, a manejar una crisis dentro del marco institucional.Renació el Congreso. Empezamos a entender esto de los ¡tres! poderes.La noche de la votación de la 125 fue toda una novedad.
En cuanto al gobierno...¿seguro que no tiene éxito? ¿acaso tienen algún otro objetivo que enriquecerse ilícitamente?
La visión sobre el tango es demasiado parcial, si me perdonás, de viejo.
El tango se viene renovando desde Piazzolla (50 años, mínimo) y se ha convertido en un representante de un grado de sensibilidad más comprometido, más feliz. El mamón tanguero de los años '30 ya fue, queda sólo para el turista y las postales.
Es curioso como el tango actual, con una movida impulsada por gente joven (hasta 50 años, más o menos), reniega de esas posturas de macho inquebrantable y llorón al mismo tiempo. No se asume en contradicciones, sino en un progreso y una búsqueda que le da tanta importancia a lo estilístico (musicalmente) como a lo habitual, sacando lo actuado del plano.
Lo que sí es extraño es como el new tango (Astillero, Fernández Fierro, Vale Tango, Caracol) tiene más agarre en los centros musicales extranjeros (ej. París) que en nuestro propio país.
En definitiva, pienso que si la política actual fuera como el tango actual, estaríamos de maravillas.
¡¡¡Ya te dije que dejes de ir los domingos a ver a Racing!!!
Esa tribuna te hace mal, nene.
¡¡¡Te llena de visiones conspirativas y derrotistas!!!
¿O será que fuera del futbol tenemos un comportamiento racinguista, sociológicamente hablando?
No se con quien consultarlo, si con Rolón o con Gantman.
El tango desde siempre me resultò INSOPORTABLE.
Lamento de cornudos, lagrimeo de fracasado, bostalgia (dirìa Portal) de un pasado barnizado e irreal...me quedo con el Flaco spinetta y "todo tiempo futuro serà mejor" y "we can work it out" de Lennon-McCartney.
Chan-chan
Anònimo Juan
Somos un poco crueles con la gente del pasado, y no tenemos en cuenta que si bien el tango es tétrico y depresivo conceptualmente, también es un relato de subjetividades construidas por personas que deseaban y amaban tal como lo hacemos nosotros.
Hay mucha gente del presente que se jacta de espíritu positivo, sin saber realmente que es lo que eso significa y ve como un pecado capital la posibilidad de sentirse triste.
La gente del pasado era triste, por la sencilla razón de que vivía en una sociedad repleta de carencias, donde la vida era mas corta y los seres amados se te morían por doquier. Un mundo sin tomógrafos, sin antibióticos, sin antidepresivos con una sexualidad encerrada con doble candado. Una sociedad hecha de gente que añoraba otro lugar.
No me gusta el tango llorón, pero siento que debo poner sobre su tumba una rosa ,en homenaje a todos aquellos que vibraron sintiéndose identificados con ello.
El tango es una especie de Titanic donde viajaba cierta forma de ser Argentino.
¿Están seguros que el posteo se refiere al tango?
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