En algún momento me planteé escribir posts lo más cortos posibles, pensando que uno tiene el deber de simplificar para hacerse entender.
A veces es peligroso sintetizar demasiado, pero experimento con un blog para tratar de decir las cosas con una sola frase que pueda caber en una remera.
Se me dio por compartirlo porque ayudando al hijo de un amigo a prepararse para las olimpiadas matematicas me recordó una frase de Albert Einstein que hice remera (en el eter, no en la tela):
A menudo el modo en que se plantea un problema importa más que la solución.
No sé si tiene que ver con este post tuyo, pero ahi fue.
Me fascina la idea de que muchas veces las cosas que creamos (en cualquier ámbito) nos sorprendan a nosotros mismos sus creadores. Parece como si fueramos canales de una fuerza cósmica. El entusiasmo sería como el lubricante de ese canal.
para poder ver hay que sentirse menos visto / las sociedades no están enfermas, son así / el pensamiento atrasa / hay que volver a mirarlo todo / no hay que buscar originalidad sino autenticidad / no respeto, historia, seriedad sino osadía, deseo, informalidad / el melodrama puede ser superado / no existe el pueblo, somos nosotros / hay ideas que seguimos usando sin darnos cuenta de que ya vencieron
3 comentarios:
!!!Genial!!!Me sirve para este momento de mi vida
Alejandro:
En algún momento me planteé escribir posts lo más cortos posibles, pensando que uno tiene el deber de simplificar para hacerse entender.
A veces es peligroso sintetizar demasiado, pero experimento con un blog para tratar de decir las cosas con una sola frase que pueda caber en una remera.
REMERAS POLITICAMENTE INCORRECTAS.
Se me dio por compartirlo porque ayudando al hijo de un amigo a prepararse para las olimpiadas matematicas me recordó una frase de Albert Einstein que hice remera (en el eter, no en la tela):
A menudo el modo en que se plantea un problema importa más que la solución.
No sé si tiene que ver con este post tuyo, pero ahi fue.
Me fascina la idea de que muchas veces las cosas que creamos (en cualquier ámbito) nos sorprendan a nosotros mismos sus creadores. Parece como si fueramos canales de una fuerza cósmica. El entusiasmo sería como el lubricante de ese canal.
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