El valor de la política
Me acordé de una idea que tuve hace mucho, que incluso publiqué en mi libro Conciencia Rockera y creo que tal vez también está en Amor y País: la principal diferencia política actual no es si se está "a la derecha o a la izquierda" -localización ya no más significativa- sino en cómo se valora a la política, en qué grado uno siente que la escena política es importante y definitoria para su forma de vivir. Y lo mejor, para mí, es tener con la política cierta distancia, una especie de comprensión abarcativa.
Es decir: hay personas que se posesionan con el tema y entonces quieren (como les ha pasado a muchos fanáticos del progresismo, esa especie moderna de reaccionarios fascistas, con mi texto sobre el voto a Macri) excluir del campo de las personas honestas a quien adoptan posiciones que les parecen reprobables. Hay otras personas, en cambio, para las cuales la política no es tan importante, y aceptan que cualquiera vote lo que quiera votar. (Un voto, cualquier voto, no puede ser nunca percibido como una cosa "grave", a no ser que -como les pasa a los desequilibrados, no se valore realmente a la democracia, por más que de palabra se mantenga esa posición por conveniencia). Esta última actitud, la tolerante y relajada, es la más democrática y la más valiosa, y los que la sienten pueden convivir con personas de todo tipo, sin darle a la diferencia de opinión una trascendencia que no tiene.
Por supuesto que desde el impotente pensamiento progre esta posición más descansada es vista como una tolerancia indebida respecto de los malos y del mal, o incluso como una cooperación con lo peor, pero es que en eso se revela su locura. En vez de lamentar el desapasionamiento actual -la gente no se mete con la misma pasión en política que en otras épocas, por ejemplo hoy ya nadie quiere (por suerte) matar a nadie-, tenemos que entender que se trata de un nuevo interés, más distante, más realista y también, paradójicamente, más beneficioso para la vida social.
Hay hoy más capacidad de centrar la aventura vital en donde ella realmente está, en el plano personal, y esto, contrariamente a lo que cristiana o izquierdistamente puede pensarse, en vez de empobrecer la vida social la va haciendo cada vez más capaz y más beneficiosa incluso para los "más desposeídos", esa eterna figura con la que la inquisición juticiera del progresismo gusta de perseguir a todo el mundo. (Y no es que hayan tenido muchos logros en su proclamado deseo de mejorar la vida de esa "clase").
La imagen es de Tang Zhigang.
17 comentarios:
Hacer política es discenir, poner inteligencia y estrategia en práctica (para todo en todo momento).
A quién le conviene que se hable o no se hable de "x", si hablando de "x" beneficiase a "y" o no. ¿En que me beneficia ver "y" y luego mostrar "x"?. La política es un camino a la fé, a creer. Después de todo,¿en quién necesito que crea "y" o "x"?.
Bueno, según me enseñaron (quiero decir que la idea no me pertenece en lo más mínimo), eso de lo que hablás se llama civismo, algo que me produce un alivio tremendo: la idea de poder progresar sin cataclismos.
Cambiando de tema, ¿no te parece que identificar-al menos subliminalmente-al Cristianismo con la Inquisición es hoy un tanto obsoleto? Produce una impresión de resentimiento intelectual, de rabioso adoctrinamiento iconoclasta. Admito que la comparación me duele por el sentimiento que denota. Ojalá encontráramos entre los partidos, los gobiernos y las culturas el nivel de tolerancia y diálogo que vemos en la Iglesia. El Papa muchas veces hace de embajador de Occidente a causa de la mazquindad de los representantes políticos y culturales, que suelen tender, no sé por qué, al integrismo de lo propio.
Bueno, perdón por la extensión y por las ramas.
Estoy de acuerdo en que izquierda/derecha hoy son términos caducos, poco o nada significativos. Pero entonces, ¿con qué términos o categorías podemos valorar hoy la política?
Entiendo que en un punto es saludable la posición de mantener distancia y no atribuirle al estado responsabilidades que están en nuestras propias manos, pero por otro lado tengo la sensación de que ésta forma de ver las cosas le saca el cuerpo a cuestiones más complejas y profundas, que existen; y si pensamos que la política sólo tiene importancia a nivel personal, estamos pasando por alto un análisis que nos afecta globalmente. Creo que hay algo de tu posición que es muy idealista, como si no existieran la industria, la economía, los sistemas de autoridad, etc, todas cosas que exigen una postura definida por parte del estado. La pregunta es, cómo se definen hoy esas posturas, sin caer en izquierda o derecha?
Me gusto mucho lo que escribiste. Aunque personalmente considero saludable el compromiso con las ideas propias, la opinión, es una forma de exteriorización, y sirve para conocernos y abrirnos al dialogo, al cambio, pero para ello, es necesario un grado de compromiso, porque el mismo exige un esfuerzo en la transmisión de la idea, de ese modo, conoceremos mejor el pensamiento del otro y tal vez, deduzcamos un error propio no percibido.
Me gusto mucho la parte en que decís, que hay personas que excluyen del campo de las personas honestas, a quienes adoptan posiciones que les parecen erróneas. A veces, uno puede apasionarse, y elevar el grado de discusión mas allá de los razonable, pero tampoco es cuestión es de ver al otro como un enemigo, esto, siempre que no se trate de cuestiones tales como los valores supremos tales como la vida o la libertad.
Saludos.
Hola Alejandro.
Yo me considero progresista, y claramente no "fascista".
Aun en desacuerdo, respeto y me interesan tus puntos de vista, pero la frase:
"hay personas que se posesionan con el tema y entonces quieren (como les ha pasado a muchos fanáticos del progresismo, esa especie moderna de reaccionarios fascistas, con mi texto sobre el voto a Macri) excluir del campo de las personas honestas a quien adoptan posiciones que les parecen reprobables."
me parece que no es correcto lo que planteás.
¿Porque no estar de acuerdo con tus (válidas, legales y legítimas) razones para votar a Macri ha de ser "fascismo"?
¿No se supone que la democracia es aceptar las diferencias?
Lo digo del alma y sin doble sentido alguno; no te excluyo del campo de las personas honestas, PERO ASI Y TODO, no coincido con vos.
¿Realmente pensás que eso me hace "fascista"?
saludos
Eva
Anónimo (¿Por qué no ponés tu nombre, de qué te escondés?): es evidente que no digo en mi texto que todo progre tiene esa tendencia fascista, pero muchos -muchos- sí, basta ver cómo mucha gente habla de Macri y cómo te consideran cuando decís que lo vas a votar.
Tampoco dije que todo cristianismo era inquisición, Barricade, soy bastante enemigo de la hipermoral católica, pero también creo que tenés algo de razón.
Lamento Martín no tener tiempo ahora para desarrollar la cuestión (en mis libros está el análisis más completo), pero no creo que se trate de idealismo, se puede pensar en todo lo que aparece en el universo social sin tener necesidad de recurrir a izquierdas y derechas. Lo que es raro es que pase lo contrario: hablando con esos términos no puede entenderse nada.
Saludos
Alejandro:
Aparezco como "anónimo" porque no tengo una cuenta en blogspot, osea, por una cuestión "administrativa", pero si releés mi mensaje, verás que abajo puse Eva.
Ese es mi nombre, Eva. Igual que la esposa de Perón y la compañera de pecados de Adán.
Al margen de eso, gracias por tu respuesta.
saludos.
EVA
Buenas noches Alejandro,
Yo estaba pensando la vez pasada, algo semejante a lo que vos planteás acá acerca del voto.
Me llegó particularmente este fragmento de tu texto porque considero que demasiada gente juzga a otra por el hecho de cambiar de partido, candidato, ideología, como si en el cambio estuviéramos traicionando a alguien:
“(Un voto, cualquier voto, no puede ser nunca percibido como una cosa "grave", a no ser que -como les pasa a los desequilibrados, no se valore realmente a la democracia, por más que de palabra se mantenga esa posición por conveniencia). Esta última actitud, la tolerante y relajada, es la más democrática y la más valiosa, y los que la sienten pueden convivir con personas de todo tipo, sin darle a la diferencia de opinión una trascendencia que no tiene.”
Así como el ser humano cambia de circunstancias en forma permanente, ¿Cómo no cambiar de proyectos si aparece uno que resulta mejor para ese preciso momento de nuestras vidas?
La idea de ser radical o peronista porque la familia lo fue siempre, defender ideales ajenos solamente por estar acostumbrados a repetir frases ancestrales, o practicar una religión sin convicción para no fallarle a alguien, habla de falta de autenticidad, y de temor hacia ese otro al cual sentimos que defraudamos.
Voto por el pluralismo y la convivencia de ideas.
Muy nutrido y lindo el blog, como siempre.
Saludos musicales, y que nos toque un día de sol para ir a comiciar,
Raquel:)
Sólo un pequeño equívoco: "Paradójicamente" lo pusiste con G.
Corregilo y borrame el comentario, que no aporta nada útil.
Me gusta mucho el weblog, gracias a tus aportes estoy empezando con Nietszche.
Con respecto a las elecciones de este pasado domingo pienso: que es bueno para la escena política nacional que haya ganado Macri. No vivo en capital, ni me interesa la política, pero estoy contento por el triunfo del pro, ojala se venga el cambio que los porteños nos merecemos.
Ayer lo escuché hablar a Macri y no me dio la sensación de ser un chanta, me parece que tiene muchas ganas de hablar menos y hacer más.
Espero que todos los argentinos tiremos todos para adelante, y no nos pongamos a buscar un auja en un pajar: ¿Franco es un señor Feudal? ¿ Es de derecha o de izquierda? ¿Es progre o fascista? Basta de elocubrar, lo importante es que los que nos gobiernen sea personas creativas, inteligentes, tolerantes y por sobre todas las cosas, que se pongan manos a lo obra para trabajar para que nuestra ciudad esté cada día más linda.
Saludos
Todo lo grande comienza siendo pequeño.Si queremos cambiar la calidad de los politicos y lograr que por fin exista "la politica" en nuestro pais , debemos empezar a mejorarnos nosotros mismos .
No seamos mas habitantes y asumamos con energia el rol de ciudadanos.
Es imposible cambiar al otro si no somos capaces de mejorarnos a nosotros mismos.
En nuestro pais no existen politicos y los asi llamados simplemente son unos pobres "rosqueritos".
En la conciencia ciudadana, el concepto de politica hoy esta mudando desde el comun :" es el arte de hacer posible lo imposible" hacia "la capacidad para resolver problemas que tienen los gobernantes".
El resultado de un extenso estudio que he venido realizando en los ultimos diez años , me avala para afirmar que el ciudadano hoy valora al politico como valora un refresco o un electrodomestico : por la capacidad que estos tienen en satisfacer sus necesidades. Asi se llega al fin de las ideologias. Cada vez mas se vota por las soluciones que por las ideas. Las ultimas elecciones en EUROPA por mencionar un ejemplo reciente asi lo demuestran.Cuando el ciudadano no encuentra respuesta en la derecha recurre a la izquierda y viceversa.
Aqui acontecio el domingo.
El principal partido politico local , el Partido Justicialista , ya ha dejado de ser el continente de las esperanzas ciudadanas no resueltas. Hoy los peronistas militantes , dejando de lado todo la iconografia partidaria , son capaces de votar por Macri , al igual que radicales o cuando los seguidores de Alsogaray votaban por Carlos Menem.
Concluyendo , asi como construimos la democracia tenemos que empezar a edificar la arquitectura de la hoy inexistente "politica".
Buena lectura.
www.arielsergiozago.blogspot.com
En este siglo, ¿que es izquierda y qué es derecha? En el pasado eran de izquierda revolucionaria los socialistas; no hace tanto tiempo, los democristianos eran izquierda. Los nacionalsocialistas eran (y son) la extrema derecha. ¿Acaso los extremos no se juntan? ¿Puede acaso el árbol bueno dar frutos malos y el malo darlos buenos?
El término "progresista" que se está usando en nuestra sociedad política, se ha hurtado del diccionario para señalar a la izquierda socialista argentina actual, cuando los verdaderos progresos sociales se ven en los gobiernos de lo que actualmente llamamos "de centro" Pregunto: ¿Era progresista la segunda presidencia de Perón? ¿Y la tercera? (del Diccionario Espasa. Progresista: De ideas políticas y sociales avanzadas enfocadas a la mejora y adelanto de la sociedad). No creo que sea útil para cualquier gobernabilidad colgarse de nombres o epítetos, sino mas bien considerar a las personas por sus valores y capacidades personales e individuales, e incluirlas en los proyectos políticos ayuda a la diversidad de opiniones en favor de soluciones justas a problemas complejos. Yo fui "tacuara", luego "radical del pueblo" y finalmente "conservador aggiornado" y mis valores, si bien no variaron fundamentalmente, siempre tuvieron una "tendencia" a favor del desposeído por falta de oportunidad y no al pobre por oportunismo. Hacemos demasiado hincapié en lo que "x" fué y no en lo que "x" es hoy día. No quisiera ser malinterpretado y que se crea que pienso que los delincuentes reincidentes del pasado deban considerarse por su apariencia actual (lobo con piel de cordero), pero la tendencia política (no la tendencia hacia actos reñidos con la moral privada y pública) normalmente cambia a medida que uno envejece hacia posiciones cada vez más comprensivas de las necesidades del prójimo.
Más para llegar al "civismo" hace falta cultivar los valores morales elevados entre los que se encuentran el patriotismo, la caridad, la comprensión y darle a las cosas su verdadero valor. Eso debe impartirse desde laa infancia, primero en la familia y luego en la escuela con el apoyo familiar.
Hasta tanto no aceptemos la necesidad de juntar en un solo haz el pensamiento de los que disienten con nosotros e incorporarlos en alguna medida nuestros partidos políticos (transversalidad que le dicen, pero en serio) para hallar en la discusión conjunta la solución diagonal que contemple a todas las partes, y dejemos la codicia y el ansia de poder de lado, no comformaremos nada que se acerque al "civismo" que menciona Barricade Blogger. No he mencionado la corrupción porque estimo que es un tema en que estamos todos de acuerdo.Gracias.
Argie
Me apasiona la política pero no más que otras cosas y coincido que es negativo y hasta deriva en actitudes poco democráticas cuando se la toma como algo central, como el fútbol, como una elusión ó ilusión de la propia vida ó realidad.
Creo que una forma de conjurar esa visión desmedida es trabajando sobre propuestas. Cuando la política se la trata básicamente en forma propuestas -"qué propones para tal tema"?...- la pasión tiende a mezclarse con la razón y sale un producto mejor y más efectivo.
Es allí donde yo me siento más contento, porque así como no hay mejor forma de escribir que escribiendo, no hay mejor forma de hacer política que tomando decisiones. Por eso también, y para cerrar, no coincido con vos que sea un hecho menor la renuncia de Gabriela a vicejefe de gobierno. Si estás a full con una gestión no te vás, y no pienso que hyaya algo más efectivo para el país ó para el Pro que hacer una excelente gestión. Porque el cargo ejecutivo en política, es el lápiz frente al papel para el escritor, no hay nada mejor.
Estoy feliz porque muchas cosas salieron bien, estamos creciendo, y para el futuro las haremos mucho mejor! De esta manera te dejo mi humilde opinión para todos los posts. Abrazo.
hola.
como veo que te gusta Deleuze, queria recomendarte que veas o leas el Abecedaire, una serie de entrevistas que le hace Claire Parnet. En este momento me refiero especialmente a la letra G Gouche (de izquierdas). Es muy interesante el modo que tiene de definir "izquierda" y "derecha".
Primera parte: http://www.youtube.com/watch?v=3sDAotmNlJk
Segunda Parte: http://www.youtube.com/watch?v=wp3CK_gJCcM
Tercera Parte:
http://www.youtube.com/watch?v=gYH8steDUWE
Re deacuerdo
Eloy
Hace tiempo escuche a un alumno de ciencias políticas decir que en su universidad que hay que deshacerse de las ideologías que lo importante era importante conformar un grupo de gente que quiera un fin común, dio ejemplos como crecimiento económico, baja de desempleo etc. Recuerdo pensar en ese momento "pobre pibe, en que universidad estudia". Por más que quisiésemos distanciarnos o no de las ideologias, estas están siempre presentes porque son el camino para ese fin común.
Quiero decir, desarrollo, crecimiento económico, pleno empleo, seguridad, etc. son fines que compartimos todos, cualquiera que sea la ideología que hayamos tomado. La cuestión es el camino que encaremos para llegar a esos fines. Ahí se hace presente la ideología queramos o no etiquetarnos con alguna de ellas. El problema esta en tomarlas como un dogma, tomar religiosamente cada un de sus postulados e ir al local partidista todos los domingos con las "máximas de abril" bajo el brazo.
También es verdad que es un facilismo a la hora de etiquetar a alguien. Estoy seguro de que si alguien ejerciendo el poder y sin ningún interés en querer tomar parte por ninguna ideología, será catalogado por los demás como derechista, izquierdista, ambidiestrista, etc. porque evaluaran las medidas tomadas, los adeptos que tenga, y las características que vaya mostrando mediante el ejercicio de poder.
Coincido en el respeto de todas la opiniones, a veces, como en mi caso, la pasión conque todavía tomamos a la política y a lo que ella concierne es muy vehemente. Pero gracias a Dios hemos evolucionado de los días de bombas y balas. No veo con malos ojos el individualismo que hoy predomina pero no veo mucho pensamiento critico, no solo en sectores en donde seria comprensible no verlo, sino en estratos sociales medio y medios altos en donde la vagancia mental se a enquistado, no solo a la hora de pensar a que político votar. No quiero mentir tampoco sabría decir si alguna vez lo tubo.
Quiero decir que las ideologías es la forma de subir la escalera hacia donde queremos llegar. Pensar en derecha, izquierda, progre, centro, ping, el rotulo que quieran no es malo, de por si. Lo malo es el Dogmatismo. Al alineamiento sin crítica alguna. El fanatismo ideológico. Creo que ante cualquier "ismo" esta el civismo...
Mauro Andres.
Publicar un comentario