¿Qué es la metafísica?

Ayer a la mañana tomaba el café con familia y amigos en el Bar El Torreón de Belgrano R y Laura, una señora que pasa y siempre nos charla un poco, me preguntó ¿qué es la metafísica? En el barrio somos así. Primero me sentí abrumado por la pregunta, como si requiriera un esfuerzo mental excesivo, pero me acordé de una manera de entenderla que me resulta útil y se la dije.

La física es la ciencia que estudia el comportamiento de los objetos reales, la metafísica es la rama de la filosofía que estudia el comportamiento de los objetos irreales. Los objetos reales se comprenden pensando en movimientos y fuerzas, en volúmenes, magnitudes, aspectos todos mensurables y objetivos. Los objetos irreales en cambio son puro sentido, capaz de interrelacionarse pero en un plano siempre dudoso, más imaginario que concreto.

¿Cuáles son los objetos irreales que aborda la metafísica? El ser, el bien, el mal, Dios, el alma, el pecado, la esencia, etc.

Entonces Laura me preguntó: ¿y la ética, es metafísica? Punzante y minuciosa, la vecina. Entonces le dije que podíamos pensar que la ética era metafísica en la medida en que abordara el tema de los valores en estado puro, es decir, cuando se pregunta qué es el bien y qué es el mal tratándolos como esencias más allá de toda experiencia o buscando un plano de universalidad para responder ese tipo de cuestiones en términos absolutos. Pero si nos planteamos otra cuestión ética como de qué manera una sociedad tiene que comportarse para ser feliz y poder crecer, entonces no era una cuestión metafísica sino una cuestión práctica. Lo que vendría a ser una física de los valores, algo más concreto y medible, en todo caso un plan para dar forma a una cosa material, como una sociedad humana.